Las autoridades en la ciudad saudí de La Meca, la más sagrada del Islam, decidieron prohibir la venta de perros y gatos como animales de compañía a petición de la policía religiosa, según publica hoy el periódico local Arab News.
La denominada "Comisión para la Promoción de la Virtud y la Prevención del Vicio" hizo esta petición después de notar que muchos jóvenes saudíes salían a la calle con sus perros en violación de la cultura y las tradiciones del reino, dijo la fuente.
El rotativo añadió que las autoridades de la ciudad de Yeda, en la costa del de Marzo Rojo, han puesto también en vigor esta decisión.
El Islam considera impuros a los perros, por lo que muchas familias tradicionales musulmanas no tienen a estos animales en casa, aunque la misma religión no hace referencia a los gatos en este sentido.
Arabia Saudí aplica una estricta interpretación de la Ley Islámica (Shariya) y la policía religiosa es una fuerza que se encarga de seguir el cumplimiento de los ciudadanos con las estrictas normas sociales de moralidad.
cc/ sgf